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Patrimonio cultural

El frijol y la caraota

Frijoles y caraotas son plantas herbáceas de crecimiento erecto, semierecto y postrado o trepador, según la variedad que también distingue el color de sus flores; así mismo el número, forma y color de los frutos que van contenidas en una vaina. La formación de las hojas es semejante en caraotas y frijoles, las primeras surgen después de los cotiledones y las demás son alternas, trifoliadas y terminadas en punta.

Los cultivos se hacen al termino de la estación lluviosa, hecho que favorece el desarrollo de las plantas, cuyo ciclo también es variable y oscila entre los 75 a los 180 días. Se propagan por semillas que independientemente de la forma en que se haya preparado el terreno, se siembran en hileras simples o apareadas. Suelen plantarse al termino de la estación lluviosa, y con frecuencia combinado con otro cultivo.agricultura VenezuelaTanto la caraota como el frijol, pese a la capacidad de adaptación de sus muchas especies, requieren en general de suelos porosos que faciliten un buen drenaje. La caraota tiene mayores exigencias de riego, especialmente en las etapas de germinación, floración y llenado del grano. El frijol es considerado más tolerante a la sequía. Ambos son sensibles a diversos tipos de plagas, a las cuales actualmente es posible controlar, al disponer de mecanismos para lograr los grados adecuados de humedad, y oportuna desinfección.

Generalmente las hojas y vainas de las plantas amarillean indicando el momento de la recolección, esta al igual que el desgranado, puede realizarse manual o mecánicamente según los recursos al alcance del agricultor. En la mayoría de los cultivos tradicionales, de pequeña escala las vainas secas, una vez separadas del resto de la planta, son dispuestas encima de una superficie dura y seca, sobre la cual se hará pasar repetidamente un tractor, con lo cual se logra que los granos se liberen de la vaina. Luego son venteados, es decir, lanzados al aire, para que se desprendan partículas no comestibles, antes de organizar su almacenaje.

En algunas regiones la trilla de la caraota, o del frijol, se hace mediante el apaleado de las vainas colocadas dentro de un saco, o bien sobre un lienzo, con el propósito de evitar desperdicio del grano, que necesariamente deberá ser venteado antes de ensacarlo.

Como son muy susceptibles al ataque de gorgojos y otras plagas, es conveniente desinfectarlos para asegurar buenas condiciones de depósito. Pese a la constante y masiva demanda de estos dos tipos de granos, y las condiciones tan favorables para su cultivo, su producción es deficitaria.

El frijol se cultiva en todo el país, destacando los estados Apure, Zulia, Carabobo, Anzoátegui, Guárico, Monagas, Cojedes, Barinas, Portuguesa, Táchira, Mérida, Trujillo, Bolívar y Sucre, y se consume principalmente en la región de los llanos y en oriente. La caraota se produce además en Lara, Miranda, Yaracuy, Distrito Capital y Falcón.

Formas de consumo

En Venezuela, y desde hace largo tiempo, ocupan los dos primeros lugares de consumo en leguminosas. La caraota negra guisada forma parte insustituible del popular plato conocido como “pabellón criollo”, y suele ser combinada con arroz, para los “moros y cristianos”. Las diversas especies se sirven en sopas y como apetecido contorno.

Los frijoles tienen también aceptación mayoritaria: guisado, solo o combinado con carnes, legumbres, forman parte del menú tradicional en las regiones llaneras y en oriente.

Las vainas tiernas de las leguminosas son un cotizado plato que tiene muy diversas formas de preparación.

 

Texto extraído del libro Cultivos tradicionales de Venezuela, editado por Fundación Bigott