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Expresiones populares

Semana Santa una fiesta del equinoccio de primavera

La Semana Santa se celebra en fecha móvil, a los cuarenta días del Miércoles de Ceniza -término del Carnaval– y oscila entre los meses de marzo y abril. Las administraciones del sector público y del privado dan asueto para la asistencia a los actos solemnes que durante este período se realizan, muchas personas atienden a la convocatoria de una serie de actos rituales, reviven tradiciones gastronómicas, juegos y creencias. Se inicia el Viernes del Concilio, este día y el Sábado Santo se llevan a cabo especiales oficios en las iglesias. El Domingo de Ramos, también conocido como Domingo de Palmas, se evócala entrada triunfal de Jesús a Jerusalén. Las misas de este día cuentan con notable asistencia, pues se hace la bendición y distribución de palmas, y en algunas iglesias también ramas de olivo. En todo el país se recogen hojas tiernas de palmera; con frecuencia son los miembros de las comunidades quienes participan en su corte y selección. Estas hojas trenzadas o dispuestas en forma de cruz cumplirán posteriormente funciones de amuleto protector de personas y hogares. En el municipio Chacao, estado Miranda, la colecta de las palmas se hace desde hace más de doscientos años en el Parque Nacional El Ávila. Desde el Viernes del Concilio sube a la montaña, que es símbolo y norte de la ciudad de Caracas, un grupo palmeros -casi 150 personas- cuyas edades oscilan entre los 6 a 80 años, hasta la llamada Cueva de Los Palmeros. Cuentan con el apoyo de las autoridades civiles, religiosas y sobre todo de los habitantes de Chacao. Hacen su corte y amarran los manojos de cogollos de palmas antes de regresar a la ciudad. Recorren a pie, con sus atados, un tramo de una de las principales avenidas de la ciudad para dirigirse a la iglesia de Chacao, donde los reciben con gratitud, respeto y alegría. Los Palmeros de Chacao integran una asociación civil, cuyo objetivo principal es la realización de labores ecológicas. En las poblaciones venezolanas en las cuales la Pasión de Cristo se celebra con importantes representaciones teatrales, los actores son miembros de la comunidad, que en cumplimiento de pago de promesa por pertenecer a alguna hermandad religiosa, o por el deseo de colaborar en estos eventos participan con gran dedicación en una función que tiene el interés y aceptación de la mayoría y atrae numerosos visitantes de aldeas, ciudades vecinas y turistas. Estos grupos de teatro no poseen formación profesional; los protagonistas son elegidos a criterio de los organizadores, según sus atributos físicos, sus condiciones interpretativas y la aceptación7 popular. Se ensayan dramatizaciones o cuadros bíblicos y cuidan con esmero la indumentaria, el maquillaje y todos los detalles. Actúan en calles y también en escenarios naturales elegidos para facilitarla comprensión de los diversos temas; no es extraño el empleo de algunos recursos de iluminación, sonido y otros que en su criterio favorezcan la presentación. Se procura que la obra pueda ser apreciada por el mayor número de personas; en ocasiones suele preservarse el área donde se presenta la actuación.

Uno de los lugares que destaca por estas dramatizaciones es Caripito, estado Monagas, donde se inician el Domingo de Ramos con la escenificación del episodio de la entrada a Jerusalén. El personaje principal va por las calles rodeado de sus apóstoles, el público emocionado agita hojas de palma y corea: ¡Elosanna, hosanna! ¡Gloria a Dios! Un grupo de pequeños que interpreta los Niños de Jerusalén, le lanzan flores naturales. Se dirigen a la iglesia, donde para la misa los actores tienen sitio reservado. Como es tradición al final del oficio se bendicen y distribuyen las palmas entre la asistencia. El Lunes Santo, en Caripito se recuerda a Jesús en el templo. Sirve de escenario una colina natural que llaman El Huerto de Los Olivos. Allí son representados tres cuadros bíblicos. En La Guaira, estado Vargas, se prepara la procesión de Jesús en la columna. El Martes Santo, cuando se conmemora la humildad y paciencia de Jesús, en Caripito nuevamente se monta el llamado Huerto de los Olivos. En Naiguatá, estado Vargas, la imagen del Nazareno es llevada del Pueblo Arriba al Pueblo Abajo, cortejada por numerosos fieles. En toda Venezuela, el Miércoles Santo -Día del Nazareno- la feligresía desborda su asistencia a los templos para rendir testimonio devocional; muchos van vestidos de hábito morado, arrastrando una cruz a semejanza de la imagen que ese día se exalta. Hombres, mujeres y niños, en largas filas hacen pago de promesas. Las procesiones consagradas al Nazareno son notables por la nutrida concurrencia, pues la imagen cuenta con incalculables devotos. Hay quienes recorren considerables distancias para estar ese día presentes en los rituales que a él se dedican. Copiosas flores naturales de color morado engalanan los altares y andas del Nazareno y La Dolorosa. En la mayoría de las comunidades se organizan procesiones que visitan altares en las calles. En algunas iglesias del país la figura del Nazareno ha logrado fervor sobresaliente, de profunda raigambre popular, como es el caso de Achaguas, estado Apure; Caigua, estado Anzoátegui, y en la Iglesia de Santa Teresa de Caracas.

 

Texto extraído del Libro de Fiestas, editado por Fundación Bigott.